Me
horrorizó. Simplemente caí horrorizado al ver el color que mi rival artístico
―ese mindundi aspirante a caricaturista― había conseguido. Creo que se me
aceleró la respiración, aun cuando mis pulmones se negaban a respirar el mismo
aire que él. Caía nieve del cielo, o tal vez fuera ceniza. Me detuve a examinar
el lienzo y el modo en que ese perfecto rojo Saturno lo teñía todo a su paso.
Era un color odioso. Era el color más expresivo que jamás habían visto mis
ojos. Una pincelada o, mejor dicho, una puñalada perfecta, trapera, por la
espalda. No podía negarlo, era toda una obra de arte, una genialidad que
merecía ser un crimen: Mi propio asesinato sobre la nieve.
SOBRE EL AUTOR: Eric Luna es Máster en Escritura
Creativa y Diplomado en Biblioteconomía y Documentación. Escritor y poeta, ha
ganado numerosos concursos literarios. Su obra se halla dispersa en diversas
plaquettes, revistas y sitios digitales.
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